Noticia
En Ménades Editorial somos hijas de Flora Tristán, Agustina González, Willa Cather, Margot Chamorro, Katherine Routledge, Zitkala-Ša, Anne Lister, Ioanna Tsatsos, Grazia Deledda… Somos hijas de Emilia Pardo Bazán y de otras tantas mujeres que escribieron, apuntalaron sus ideas en trozos de papel y lucharon sin descanso de una manera u otra a golpe de pluma.
O nos gustaría haberlo sido, porque, en realidad, somos hijas de un patriarcado y una sociedad que nos ha ninguneado, pero gracias a la recuperación de sus textos, de sus nombres, nuestras hijas sí podrán decir que son hijas de ellas. Con ellas hemos aprendido, y seguimos aprendiendo, sobre nuestras raíces, sobre lo que fuimos y lo que construímos. Cada día que pasa somos un poco distintas, porque solo conociendo lo que hemos sido podremos comprender lo que somos y lo que queremos ser.
En Ménades, hoy y todos los días del año, son días de lucha contra la omisión y la invisibilización. Días en los que trabajamos aportando nuestro granito a la construcción de una genealogía que saque del olvido a las escritoras, ponga en valor la memoria de su pluma y ejerzan la AUTORIDAD de ser AUTORAS. Con todas ellas conseguimos que sean muy distintas las fuentes de estudio y de formación, las fuentes que constituyen la base de las nuevas generaciones, las fuentes que recogen las huellas que nuestras antepasadas dejaron.
El 8M es un día para alzar la voz por las que estuvieron, las que debieron estar y las que vendrán. Es un día de especial reivindicación en el que recordar a todas las que estuvieron luchando por nuestros derechos antes que nosotras, a las que rompieron barreras y allanaron nuestro camino.
Hoy, y todos los días, alzamos nuestra voz para luchar por ellas, por nosotras y por las que vendrán. Porque somos hijas de las escritoras que nos precedieron.
Las Ménades.
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